Eran sus pies curiosos y traviesos , los que la llevaron aquel día a recorrer un sendero que seguro su cabeza no hubiese transitado jamás, y en esa disociación además tomaron partida sus manos, que sin saber cómo , cuándo, ni dónde acabaron debajo de una camisa y encima de una suave piel de miel y para acabar de complicarlo todo un poco más , una boca hambrienta se encontró con la suya desatando la anarquía total de unos sentimientos, que su precavido y miedoso corazón guardaba celosamente.
Ante tal big-bang de emociones, los pies pensaron que se habían metido en un lio y empezaron a correr, llevándose sus manos, su boca y a una cabeza aturdida a refugiarse en su universo tranquilo y seguro.
Y allí sigue en el lugar de siempre, aunque a veces parece cruzar las piernas para sujetar a unos pies curiosos y traviesos que le han regalado a sus labios una nueva sonrisa.
Evaglauca
4 comentarios
Gata -
Tienes razón Primary, por eso digo que "a veces" habría que sujetarlos, pero claro si los sujetas, nunca sabras que hubiera pasado si los dejas correr...
Besos para ambas! :)
PIMAMARY -
evaglauca -
Un besito
Gata -
Un besito