Lápiz, papel y un millón de palabras dando vueltas en su cabeza, ese era casi siempre el inicio de todas sus historias.
Letras que surgían de algún naufragado recuerdo de canción, o que simplemente se escapaban de aquellos libros que le habían acompañado, en noches en las que no había otro refugio, que el abrazo de una historia a la luz de la mesita de noche.
Empezó admirándolas, le divertía jugar con ellas y el sonido que tenían independientemente de su significado. Las atesoraba en pequeñas libretas, para cuando tuviese necesidad de ellas, incluso tenía algunas guardadas en una cajita de cartón, puesto que quienes la conocían se las regalaban para su cumpleaños.
Y con toda esa admiración y respeto por ellas, siempre que las necesitó la dejaron muda, aunque no se lo tiene en cuenta, sabe perfectamente que aquello que importa no necesita de muchas palabras para explicarlo, basta con una mirada desde el fondo del alma.
Evaglauca
4 comentarios
Evaglauca -
Gracias por tus palabras, las echaba de menos.
De Noah no se nada, espero que esté bien, quiero creer que está tan bien, que no necesita escribir;)
Evaglauca -
Un cariño, ah y por si lo acepta una palabra para que empiece su colección, es NUBE.
Gata Negra -
Un beso
PD. Sabes algo de Noah, al menos si está bien??
OPin -
Cariños.