La alquimia de los deseos

Los deseos que nacen de la luz desprenden una sustancia capaz de hacernos invencibles.

Armand, empezó a destilarla desde una edad muy temprana, a pesar de todos los pronósticos médicos.

Anheló  andar con tanto fervor que sus ganas corrieron como torrentes de lava por sus venas llevándolo a sus primeros pasos.

A partir de ese momento, el corazón de su madre tuvo la certeza de que cualquier gesta que el pequeño se propusiese se haría realidad, porque sus ansias junto con su entusiasmo, tenían la alquimia que destilan los deseos cumplidos.

Evaglauca

 

(Dedicado a un sol que juega con las palabras y al final logrará conquistarlas)

 

6 comentarios

[evaglauca - 29 de agosto de 2009 - 01:00]

Seguro que sí Rafaela.
bssos

[eldiarioderafaela - 28 de agosto de 2009 - 15:20]

Ojalá mis deseos los escuche el Universo.

bss

[Evaglauca - 27 de agosto de 2009 - 22:41]

Gracias Ramón, a veces me sorprenden la reacción que provocan mis palabras, pero te agradezco mucho las tuyas.
Hasta pronto

[Ramón - 27 de agosto de 2009 - 19:43]

Los deseos que nacen de la luz desprenden una sustancia capaz de hacernos invencibles....

Ojalá sea cierto. Voy a creer en ti ciegamente. Un beso fuerte y me encantó tu texto. Hasta pronto.

[evaglauca - 27 de agosto de 2009 - 13:40]

Gracias Than, tu siempre tan galante.
Besos

[Tanhäuser - 27 de agosto de 2009 - 07:24]

Armand es afortunado y no sólo por esa voluntad e ilusión inquebrantables. Es afortunado porque a su lado hay una madre que cree en él. Con esa fe de compañera, no hay barrera que no se pueda salvar.
Me has emocionado.
Besos