El frio inundaba cada una de sus partículas, antes cálidas y vitales. Un frío indoloro había tomado todas las sensaciones llevándolas a la nada absoluta. Entonces recordó haber deseado con toda su alma morir, pero no entendía de que modo se había quitado la vida. El frio, el frio también empezaba a congelar su mente, no reconocía el lugar , ningún olor le era familiar y un ensordecedor silencio acunaba sus oídos, que desconcertados , se concentraban en captar algún sonido familiar. De pronto algo acaparó toda su atención. Emergió de las sombras, una melena azabache enmarcaba un rostro bello y frío, que con una semisonrisa dijo -¿Ya has tenido bastante, o necesitas morir un poco más? Sus palabras , circularon como torrentes de lava, tornando el frio en densos ríos de miedo, y haciendo que los recuerdos abordasen su mente. -Ha sido suficiente. Jamás pensé que la muerte fuera tan bella. -Acaso esperabas una calavera con guadaña incluida. -Algo así. -Los humanos sois tan tragicómicos. Hazme un favor puesto que no quiero volverte a ver hasta que no sea tu hora, cuídate y olvídate de los somníferos. Cuando despertó en el hospital, el médico le comunicó que estaba viva de milagro, que unos segundos más tarde no hubiese habido nada que hacer , mientras ella escuchaba con la serenidad que da, haber mirado a los ojos a la misma muerte. Evaglauca
5 comentarios
Evaglauca -
Un abrazo
rafaela -
besos
Evaglauca -
Gata; lo dicho es pura ficción, ¿quien no ha fantaseado nunca con su final?
Un abrazo a las dos
Gata -
Que bien lo has escrito y descrito.
Buen finde :)
PIMAMARY -